¿Pueden los salmones discriminar emociones? ¿Es su cerebro tan complejo como el del homo sapiens? ¿Podemos experimentar con salmones de piscifactoría? ¿Es necesario que el salmón esté vivo?
Craig Bennett, Abigail Baird, Michael Miller, y George Wolford (2009) realizaron un análisis neuronal mediante una Resonancia Magnética Funcional durante la realización de una tarea de discriminación emocional. Para ello, usaron como sujeto experimental a un salmón de unos 18 cm de largo y 3,8 libras de peso.
La tarea consistía en presentar fotografías de personas con distintas emociones y preguntar, al salmón, que emoción estaban experimentando estas personas. Se usaron 15 fotografías con una duración de 10 segundos por fotografía un intervalo de descanso entre fotografías de 12 segundos.
Los resultados muestran que existen diferencias significativas en la activación de las áreas involucradas en la discriminación emocional.
Incluso… en un salmón muerto.
Esta inusual investigación ha sido galardonada con el premio Ig Nobel de Neurociencia 2012. Se pone de manifiesto como estas técnicas de neuroimagen tan sofisticadas pueden reflejar diferencias significativas donde no hay más que ruido...
LIDAC
Referencias
Premios Ig Nobel 2012: http://www.improbable.com/ig/winners/#ig2012
Craig M. Bennett, Abigail A. Baird, Michael B. Miller, and George L. Wolford, poster, 15th Annual Meeting of the Organization for Human Brain Mapping, San Francisco, CA, June 2009.
Santiago Benjumea: I CONGRESO SAVECC, Sevilla 23 y 24 de noviembre de 2012.